En los tiempos de Noé los hombres eran perversos y rebeldes. Nadie se
interesaba en las cosas de Dios y cada uno hacía lo que le venía en
gana. Por todas partes reinaba la violencia y mucha injusticia. Dios
estaba muy triste porque a cualquier lado que mirase, no veía más que
maldad. No estaba contento con el resultado de haber creado a los
hombres y dijo: „¡He decidido borrarlos de la faz de la tierra, y
también a los animales!“
El único que hacía caso a Dios era Noé, porque vivía en una
estrecha relación con el Señor, teniéndole siempre en cuenta. La gente
que conocía a Noè sabía que se portaba bien.
Noé y toda su familia eran un ejemplo para los demás. Tenía tres hijos llamados Sem, Cam y Jafet.
Un día, Dios le dijo:“He decidido terminar con toda la gente. Por su
culpa hay mucha violencia en el mundo, así que voy a destruirla, y al
mundo entero. Construye un arca de madera resinosa, y haz cámaras en
ella; y cubre con brea todas las rendijas del arca, por dentro y por
fuera, para que no le entre agua. Haz el arca de estas medidas: 135
metros de largo, 22 metros y medio de ancho, y 13,5 metros de alto.
Hazla de tres pisos, con una ventana como a medio metro del techo, y con
una puerta a uno de los lados. Yo voy a mandar un diluvio que inundará
la tierra y destruirá todo lo que tiene vida en todas partes del mundo“.
Noé hizo todo lo que Dios le había mandado.
Dios le dijo a Noé: “Pero contigo estableceré mi pacto, y en el arca
entrarás tú con tus hijos, tu esposa y tus nueras. También llevarás al
arca un macho y una hembra de todos los animales que hay en el mundo,
para que queden con vida igual que tú. Contigo entrarán en el arca dos
animales de cada clase: tanto de las aves y animales domésticos, como de
los que se arrastran por el suelo, para que puedan seguir viviendo.
Junta además toda clase de alimentos y guárdalos, para que tú y los
animales tengáis qué comer.”
Y Noé lo hizo todo tal como Dios se lo había ordenado.
Trabajó duro hasta el día en que entró en el arca con su familia y
con los animales que habían venido hasta el arca, en parejas, tal como
Dios les había dicho. Después, Dios cerró la puerta tras ellos.
Llovió con toda fuerza durante cuarenta días. Las aguas subterráneas
salieron a la superficie violentamente y las reservas de los cielos se
derramaron. El nivel de las aguas creció y creció, hasta que llegó a
donde estaba el arca y ésta empezó a navegar. En poco tiempo, las
montañas se inundaron y el agua llegó hasta siete metros por encima de
la cumbre más alta. Todos los seres vivos se ahogaron: aves, fieras,
reptiles de todas clases y todos los hombres. En resumen, Dios había
borrado todo ser viviente de la faz de la tierra. Únicamente Noé y los
que estaban con él en el arca se pudieron salvar del diluvio.
muy largo para ser resumen bobos
ResponderEliminarLa verdad me parecio muy buen resumen , para el imprudente de arriba resumieron cuatro capitulos le primero listo.
ResponderEliminarexsacto
ResponderEliminar